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Exposición Tirant Lo Blanc. Una narración pictórica del mejor libro del mundo

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Rafael Canogar

La asidua presencia del pintor, grabador y escultor Rafael Canogar (Toledo, 1935) en Círculo del Arte desde los mismos orígenes del club (ver revistas 4, 12, 43, 53 ,62, 76 y 77) nos revela el papel fundamental de esta excepcional personalidad artística del arte contemporáneo español.

La evolución creativa del artista se caracteriza por un cambio permanente, un periódico rompimiento con el pasado y esporádicos retornos al origen, si bien en un nivel conceptual y de madurez más avanzado (ver la revista especial 62, dedicada a Canogar con motivo de la concesión del Premio Nacional de Arte Gráfico 2011).

Así, a mediados de los 50, en que celebra ya sus primeras exposiciones individuales, inicia Canogar el camino hacia el informalismo y la vanguardia, es decir, hacia una pintura libre de ataduras formales y académicas, orientada a la abstracción.

Su búsqueda de contacto con la modernidad y su afán de libertad ideológica y cultural le llevan a convertirse en 1957, junto con Antonio Saura, Luís Feito, Manuel Rivera, Pablo Serrano, Manuel Millares y otros, en uno de los fundadores del grupo El Paso. En su obra de aquella época fusiona las enseñanzas de la abstracción norteamericana y europea con sus vivencias profundamente españolas.

Insatisfecho con lo ya alcanzado, inicia Canogar hacia mediados de los 60 una nueva etapa de experimentación. Buscando construir mediante otro discurso pictórico una iconografía y una estética propias, desarrolla una pintura figurativa de gran impacto visual, propia del realismo crítico y centrada en una realidad social y política dramática y represiva.

A partir de mediados de los 70 emprende Canogar una nueva ruptura y abandona progresivamente el realismo en un proceso gradual de eliminación de la figura humana, de la que inicialmente aparecen todavía rostros, máscaras y cabezas, como elementos plásticos alusivos al hombre despojado ya de rasgos individuales Avanzando por la ruta decisiva de la abstracción, desemboca Canogar en la construcción de espacios que compone con formas frecuentemente geométricas y elementos visuales de morfología irregular.

 

 
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