Jose Luis Fernández

Tras su primera formación artesana y artística en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Oviedo y en talleres locales de ebanistería y marmolería, José Luis Fernández se trasladó  en 1960 a Madrid, donde completó su formación trabajando con escultores consagrados y donde consiguió abrir su propio taller en 1964. Apoyándose en la obra de Brancusi y de Henry Moore, pero sin adscribirse a ningún movimiento determinado, comienza Fernández a partir de 1969 a estilizar progresivamente sus esculturas figurativas, incorporando sucesivamente elementos de síntesis, de abstracción parcial y de metamorfosis de las formas naturales. Así nacen a partir de 1975 varias series con las que va conformando su propio estilo personal. Entre ellas destacan: "Osamentas" -esculturas inspiradas en referencias óseas-, "Encuentros" –estilizaciones de la figura humana-, "Totems" – basados en referentes anatómicos- y "Germinaciones y Floraciones", en las que se combinan formas vegetales y humanas de un modo estilizado y metafórico. En la producción artística de José Luis Fernández hay sin embargo una escultura que goza de la mayor popularidad mediática y social. Es la famosa estatuilla de los Goya, creada en 1988, el galardón anual más codiciado del cine español.